Han dicho: "La cultura del laicismo radical es un fraude y un engaño, no construye nada (...)". Pobres. No se dan cuenta o no quieren darse cuenta de que les ha construido a ellos mismos. Les aterra verse igual de monstruosos que aquellos que critican. Se esconden detrás de grandes micrófonos porque no quieren verse en el otro lado de las trincheras. Del lado de la cultura del cristianismo radical.
2 comentarios:
Los extremos siempre son igual de ilógicos. Como dijo Aristóteles: la virtud está en el término medio.
^^ Besitos
Eso eso, del medio como el PP, esos sí que son ilógicos los hijos de la gran puta.
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